1.- COLECCIÓN DE LEPIDÓPTEROS.-

Ya que como digo en mi poema «El mundo del mañana», los niños de hoy serán los hombres del mañana, dedico esta entrada a un niño de once años, llamado Alex Pujadas, de Barcelona, hijo de un compañero mío de trabajo, y que comienza a descubrir el mundo, y en particular a descubrir sus propias inquietudes, en este caso los insectos. Feliz viaje, amigo Alex.
Siempre me gustaron los lepidópteros (o mariposas), desde muy pequeño. En su momento, a los doce años confeccioné mi propia colección autóctona de estos insectos, a base de carreras por los prados y paciencia, y poco a poco fui advirtiendo la majestuosa belleza que es capaz de engendrar la naturaleza, cuyos misterios están en parte desvelados por la teoría de la selección natural de Darwin -de la cual soy un gran devoto-. ¿Es justo sacrificar especímenes o privarlos de su libertad para su estudio?. Pues tal vez probablemente no lo sea, pero es evidente que esto se hace a gran escala en los museos de la naturaleza, y es el modo más eficiente de conseguir llegar a conclusiones veraces y profundas en lo que respecta a la anatomía. Lo mismo se hace con las plantas. Ahora, tras un par de décadas, pienso que si algún día me da por cazar animales o plantas para su contemplación o estudio lo haré desde detrás de una cámara o unos prismáticos, pues considero que si queremos preservar este planeta para las generaciones venideras tenemos que empezar por aplicar un principio conservativo estricto a todos nuestros actos diarios.

Ahora bien, existen personas por todo el mundo que se dedican a criar en cautividad lepidópteros a gran escala, para posteriormente ser disecados. De hecho estas actividades están amparadas por los organismos reguladores de las leyes de Protección de la Naturaleza y no constituyen delito. El delito lo sería si los especímenes procediesen del estado de libertad y fuesen especies protegidas. En otras palabras, sacrificar estos ejemplares equivale por ejemplo al sacrificio que hacemos con aquéllos animales de los que nos alimentamos y que criamos en cautividad. En realidad, sigo creyendo que no es justo, pero si observamos la propia naturaleza podemos ver como se dirime una continua contienda sin cuartel entre las especies, depredadores frente a presas, y de esta contienda surge el equilibrio que matemáticamente se modela con las ecuaciones diferenciales de Lotka-Volterra, un par de ecuaciones diferenciales acopladas cuya solución explica la variación biológica en los ecosistemas, y que está formada por dos funciones temporales que modelan la variación de la cantidad de depredadores y de presas en un par de especies que estén relacionadas de este modo. En realidad este par de ecuaciones diferenciales se extienden y particularizan a cada par predador-presa del ecosistema, y establecen al mismo tiempo que la tasa de aumento de las presas es el crecimiento natural de esa especie menos la tasa de muertes por encuentro con el predador, mientras que la tasa de aumento del predador es su crecimiento por encuentro fructífero con la presa menos su tasa de muertes naturales. Evidentemente esto es una simplificación, pero lo suficientemente fina como para que, resolviendo el gran sistema de ecuaciones diferenciales de un ecosistema, obtengamos soluciones basadas en parámetros (siendo los parámetros los que intervienen en las ecuaciones diferenciales y que han de ser obtenidos empíricamente) que representan las cantidades variables en las sucesivas generaciones de cada especie en el espacio de especies, y que esquematizan la variabilidad temporal biológica en cada biotopo. Los ecosistemas que perviven lo hacen merced a la aproximación a situaciones de alejamiento y acercamiento sucesivos a la posición teórica de equilibrio que se obtendría igualando todas las tasas de cambio de todas las ecuaciones a cero, y gracias a la contienda, que es precisamente uno de los mecanismos naturales de poda de los peor adaptados que provee la naturaleza y que mueve precisamente la evolución biológica sobre la Tierra. Al final resulta que un hecho puntual, como por ejemplo que en una región de la sabana africana los leones cacen muy eficazmente, puede ayudar a que todo un ecosistema no se desmorone, porque en este mundo todo está relacionado con todo. Nosotros no somos más que una especie animal más, y por ello también somos depredadores, sólo que nuestros medios y métodos de caza son mucho más sofisticados que los de los animales, y en muchos casos no buscan nuestro sustento, que es el fin realmente noble de la caza, sino la diversión, aspecto lúdico que aunque entraña la muerte de los ejemplares cobrados, puede poseer consecuencias beneficiosas para los ecosistemas, cuando mediante la práctica cinegética se consigue el control demográfico de las especies.

Aun así, a pesar de todo, no he podido resistirme a conseguir una colección de lepidópteros de todo el mundo, y cada día que pasa me maravillo más y más de la suma perfección de Natura, el verdadero dios (o diosa). Pondré un ejemplo ilustrativo: el reverso de las alas de ciertas especies de lepidópteros tienen forma y color de hoja de árbol. Es evidente que las variaciones aleatorias, asociadas a la divergencia de caracteres, la cual no es sino la expresión visible de la mutación genética, que aparecieron en algún momento puntual y que conferían cierto parecido a hojas a las alas de esos ancestros naturales, les daban ventaja frente a otros ancestros lepidópteros del mismo ecosistema, y esto dio lugar a que poco a poco fuesen apareciendo especies con esta morfología, dado que otros animales que se alimentaban de lepidópteros encontraban con mayor dificultad a estas especies miméticas. Otro tanto ocurre en un fenómeno bastante extendido en los lepidópteros: la presencia de ocelos con formas muy similares a la de ojos. Es un hecho comprobado que los pájaros atacan a estos ejemplares precisamente en esos ojos, por llamarles más la atención, y no en el tórax, el abdomen o la cabeza. Por tanto, esos especímenes sobreviven, y esto no debería extrañarnos, pues ahora observamos precisamente que se hallan entre nosotros y no han desaparecido. Simplemente porque la variación consistente en tener esos «ojos» les dio ventaja frente a otras mariposas asentadas en el mismo nicho biológico, que eran atrapadas por sus depredadores. Selección natural al 100%. Como ejemplos de la primera de las circunstancias puedo exponer el caso del lepidóptero Kalima Inachus, y como ejemplos de la segunda circunstancia se me ocurren por ejemplo la Caligo sp., o la Morpho Peleides, ambas dotadas de una belleza embaucadora.

Para contagiaros de esta contemplación enriquecedora del mundo que nos rodea, que practican miles y miles de personas en el planeta, y cuya belleza y verdad nos aguardan en cada rincón insospechado, he insertado aquí once fotografías correspondientes a mi actual colección de lepidópteros.







2.- ORNITHOPTERA PRIAMUS POSEIDON Y ORNITHOPTERA GOLIATH SAMSON.-
Incluyo aquí las fotografías de dos lepidópteros recientemente añadidos a mi colección, más concretamente del género Ornithoptera, mariposas que se suelen conocer coloquialmente en inglés como Birdwings, o sea, alas de pájaro.
Se trata de lepidópteros de gran envergadura, entre los que se hallan las dos especies mayores conocidas por la ciencia, concretamente la mariposa Ornithoptera alexandra (la mayor que existe), y la mariposa Ornithoptera goliath (la que ostenta el segundo lugar en tamaño).
La primera que presento es la Ornithoptera priamus de la subespecie poseidon, en particular el macho.

La segunda es la Ornithoptera goliath de la subespecie samson, también el macho.

Ambas especies habitan de manera natural en los bosques tropicales de Papúa Nueva Guinea.
3.- ORNITHOPTERA CROESUS Y ORNITHOPTERA PRIAMUS ARUANA.-
El naturalista y viajero galés Alfred Russel Wallace, codescubridor junto con Charles Darwin de la idea de la selección natural aplicada a la evolución de las especies, realizó importantes viajes de exploración y descubrimiento, que dieron lugar a una fascinante vida. En la cuenca del Amazonas pasó algún tiempo, mientras germinaban las ideas en su mente, y fue particularmente fecundo su viaje al archipiélago malayo. Allí observó que se podía trazar una línea imaginaria divisoria entre la parte de Indonesia que tenía especies relacionadas con las propias de Australia y la parte de Indonesia que tenía especies emparentadas con las de origen asiático. A esta línea se llamó en su honor ‘línea de Wallace’.
Wallace fijó mucho su atención en los insectos de Indonesia y Malasia, se hallaba en un verdadero paraíso perdido, y los especimenes estaban dotados de una belleza extraordinaria; en general eran mucho más llamativos que los de Occidente. Como fruto de sus hallazgos y descubrimientos, el lepidóptero del género Ornithoptera de nombre científico Ornithoptera croesus, tiene como nombre común y es conocido por ‘alas de pájaro doradas de Wallace‘ (Wallace’s golden birdwings). Se trata de un lepidóptero pariente cercano de la especie Ornithoptera priamus. En particular, se distribuye geográficamente al Este de la línea de Wallace, y llamó tanto la atención del naturalista su captura, que la describió en estos maravillosos términos: «The beauty and brilliancy of this insect are indescribable, and none but a naturalist can understand the intense excitement I experienced when I at length captured it. On taking it out of my net and opening the glorious wings, my heart began to beat violently, the blood rushed to my head, and I felt much more like fainting than I have done when in apprehension of immediate death. I had a headache the rest of the day, so great was the excitement produced by what will appear to most people a very inadequate cause.«, (The malay archipielago, 1869).
En general las especies del género Ornithoptera presentan un notable dimorfismo sexual, la hembra suele ser oscura y mucho mayor, mientras que el macho es muy llamativo. Presento a continuación una fotografía de dos especimenes, macho y hembra, de la especie Ornithoptera croesus.

Para ver las diferencias y similitudes de esta especie con respecto a la especie priamus, incluyo además dos especimenes, macho y hembra, de la especie Ornithoptera priamus aruana.

4.- DOS LEPIDÓPTEROS AMERICANOS: DANAIS PLEXIPPUS Y DYAETHRIA LIDWINA.-

Incluyo en esta entrada dos nuevos lepidópteros que he conseguido, más concretamente representando a dos especies oriundas del continente americano, si bien la primera ha extendido su distribución a las Islas Canarias, Andalucía y algunas regiones de Australia.
La primera de ellas es la muy conocida mariposa monarca, Danais plexippus para los hombres de ciencia, perteneciente a la familia Nymphalidae, a la que también pertenecen especies europeas como Aglais urticae, Aglais io, Nymphalis antiopa, Vanessa atalanta o Cynthia cardui. El aspecto por el que más se conoce la mariposa monarca es su migración desde Canadá a los cuarteles invernales del sur de Estados Unidos y México, a finales del verano o principios del otoño del hemisferio boreal. Los individuos viajan para hallar el clima propicio para la hibernación, y se acumulan en grandes cantidades en determinados lugares, siendo fieles a las rutas trazadas por generaciones anteriores. Participan cuatro generaciones en el proceso de ‘memorización’ de la ruta, la última de las cuales, que es la más longeva y vive durante 8 meses, retorna de nuevo a Canadá, completando el ciclo.
Por su parte el lepidóptero de la imagen inferior es un especimen de Dyaethria lidwina, o mariposa 88. La partícula de especie es una referencia a santa Liduvina, canonizada santa por aparentes poderes curativos, patrona de los patinadores y de las enfermedades crónicas, y que según se cuenta, pudo ser un caso de esclerosis lateral amiotrófica de la Edad Media, dado que su enfermedad comenzó con una caida sucedida en una sesión de patinaje. Fueron grandes las limitaciones en su cotidianidad. Se alimentaba solamente con el pan y el vino de la eucaristía, y murió a los 53 años por su enfermedad.
Más concretamente, esta especie es oriunda de los Neotrópicos americanos, desde México hasta Paraguay, y pertenece también a la familia Nymphalidae. Lo que la caracteriza es el número 88 cincelado en las alas inferiores, producto de la presión selectiva destinada a la reproducción. Algunas veces, como es el caso del especimen cuya fotografía presento, el 88 es un 89, se trata de una exaptación producida por una mutación genética.

5.- ORNITHOPTERA TITHONUS Y ORNITHOPTERA PRIAMUS URVILLIANUS.-

Siguiendo con los lepidópteros del género ornithoptera, en esta entrada adjunto las fotografías de dos ejemplares macho de ornithoptera tithonus (arriba) y de ornithoptera priamus urvillianus (abajo). Poseen el tipo de morfología que caracteriza a las mariposas ornithoptera. La ornithoptera priamus urvillianus es una especie que habita de manera natural en la costa nordeste de Australia, muy cerca de la zona de distribución de ornithoptera priamus poseidon (ya vista en esta web), y de hecho los ejemplares de estas dos especies son capaces de hibridar, reproduciéndose entre sí. Más específicamente, ornithoptera priamus urvillianus se extiende de manera natural por las islas Moluccas central y sur, Nueva Guinea, archipiélago Bismarck, islas Salomón y Nordeste de Australia.
Ornithoptera tithonus se distribuye por las islas de Papúa Nueva Guinea y sus islas vecinas.

6.- TRES LEPIDÓPTEROS EUROPEOS DE LA FAMILIA DE LOS PAPILIÓNIDOS.-
Incluyo en esta entrada tres lepidópteros que he conseguido recientemente. Se trata de especímenes pertenecientes a tres especies clasificadas dentro de la familia de los Papiliónidos. Esta familia de mariposas tiene abundantes especies distribuidas por todo el mundo. Suelen ser lepidópteros de tamaño relativamente grande, de vuelo potente y preciosas alas.

Más concretamente estas tres especies habitan de manera natural en Europa. La primera de ellas es el lepidóptero Parnassius Apollo. De manera natural las mariposas de esta especie viven en zonas de alta montaña, puesto que sus orugas se alimentan de plantas nutricias ubicadas a gran altitud sobre el nivel del mar. Esta especie tiene un vuelo lento y a veces se deja ver en las cuestas de esos enclaves. De este modo, por estar aisladas en parajes incomunicados entre sí para ellas, que no forman un área conexa, se llegan a producir exaptaciones locales propias de cada lugar específico donde se hallan, que son o no seleccionadas por selección sexual y dan lugar a una gran variabilidad en esta especie, de modo que en cada una de las zonas que habitan pasa a haber subespecies locales, claramente distinguibles de las de otras zonas, a veces por detalles mínimos. En ocasiones basta cambiar de una cadena montañosa a otra cercana para encontrar otra subespecie diferente. Como dato curioso cabría decir que la aparición y adaptación de los ancestros de estas mariposas en el régimen de vida en alta montaña tiene mucho que ver con la última de las glaciaciones, la glaciación de Würm, o Würmiense, que provocó grandes migraciones en la fauna mundial. Las especies que migraron buscaban un clima más templado, escapando del frío, quedando aisladas después aquellas que tenían poca movilidad o dependencia de la flora o fauna locales para su sustento, en lugares de montaña muy distanciados entre sí, cuando se retiró la glaciación. Esta fue la causa del aislamiento de especies animales como el oso ibérico, o especies de insectos, en lugares montañosos muy lejanos entre sí.

La segunda especie que presento es el lepidóptero Papilio Machaon, del que ya hablé en esta web hace ya unos años, con lo que poco más voy añadir, salvo que es una mariposa de vuelo muy rápido y potente y que tiende a aparecer a mediana altitud sobre el nivel del mar (aunque sí es cierto que he registrado observaciones de individuos de esta especie en parques situados a nivel del mar, a los que probablemente habrían sido atraidos por las especies de plantas que había allí, entre las que estaban las plantas nutricias de sus orugas).

La tercera especie que aquí muestro es el lepidóptero Iphiclides Podalirius,sobre el que también he hecho una introducción hace años en esta web. Más específicamente, el especimen mostrado en esta fotografía no es un ejemplar de la subespecie Feisthamelii, es decir, no es un ejemplar ibérico, puesto que no presenta los ocelos de las alas posteriores de gran tamaño ni las bandas de dichas alas gruesas y con un tono azulado. Este especimen es una Iphiclides Podalirius del centro de Europa.
7.- ORNITHOPTERA PRIAMUS POSEIDON Y ORNITHOPTERA CROESUS LYDIUS.-

Incluyo aquí una fotografía de dos nuevos ejemplares de mi colección de lepidópteros. Se trata de dos machos, el de arriba de la especie Ornithoptera priamus poseidon y el de abajo de la especie Ornithoptera croesus lydius. De estas dos bellas especies ya he hablado en algunas entradas de esta web, por lo que ahora no comentaré nada más al respecto.
8.- LICAÉNIDOS PALEÁRTICOS (1).-
Incluyo aquí una fotografía de una caja entomológica con lepidópteros de la zona paleártica, pertenecientes a la familia Lycaenidae. Esta familia de mariposas está caracterizada por especies normalmente de reducido tamaño, teniendo por lo general los machos coloración entre azul y violeta y las hembras tonalidades menos llamativas, por regla general parduzcas. En España destaca dentro de esta familia la especie Polyommatus icarus, que sigue el paradigma morfológico comentado. En Europa la diversifación de esta familia es extraordinaria, como se verá en ésta y las 3 cajas de colección que le seguirán en orden de presentación en esta web.

9.- LICAÉNIDOS PALEÁRTICOS (2).-
Sigue a continuación una fotografía de la segunda caja entomológica de mariposas de la familia Lycaenidae. Este grupo de géneros tiene particularidades etológicas que se engloban dentro del vocablo mirmecofilia. Esta palabra no quiere decir otra cosa que un alto porcentaje de licaénidos viven asociados en vida con distintas especies de hormigas. Más concretamente, la mayor parte de las especies de los licaénidos presentan comportamientos sociales en su fase larvaria con hormigas adultas y con larvas de hormigas. Estos licaénidos pueden asociarse en mutualismo, colaborando con la recolección de azúcares o melazas, de los que las hormigas son consumidoras, comportamiento que también suele asociar a los áfidos o pulgones con ellas por el mismo motivo. La relación que existe entre los licaénidos y estas hormigas puede ser también parásita (cuando las larvas de estas mariposas devoran a las larvas de hormigas) y comensalista (una forma de simbiosis en la que hormigas y larvas de licaénidos comparten el azúcar, proceso en el que intervienen excreciones naturales de los propios licaénidos. Este proceso significa beneficio para los licaénidos y ni benificio ni perjuicio para las hormigas).

10.- LICAÉNIDOS PALEÁRTICOS (3).-
En esta entrada añado una fotografía de la tercera caja entomológica de mariposas de la familia Lycaenidae. En esta caja se despliega una multiplicidad de bellos licaénidos, desde la Lysandra Hispana y la Plebejus Idas, pasando por la bella Lysandra Coridon, y alcanzando el máximo de belleza tal vez en la Callophrys Rubi, que se caracteriza por ser marrón en el anverso y verde esmeralda en el reverso (de ahí le viene el calificativo de «rubí»). Todas estas mariposas son visibles en Europa, no en el continente al completo, es decir, se distribuyen por distintas áreas dependiendo de la especie. Tienen un vuelo rápido, lo que unido a su pequeño tamaño las hace complicadas de capturar con una cámara en su medio natural, no así en una caja de colección como ésta, en la que podemos apreciar sus detalles específicos.

11.- LICAÉNIDOS PALEÁRTICOS (4).-
Con esta entrada termino la exposición de lepidópteros pertenecientes a la región paleártica propios de la familia Lycaenidae. Más concretamente, en la caja de colección que exhíbo más abajo, los especímenes son mariposas habituales de algunas zonas de Asia y África, con otros ejemplares propios de Europa. Como se puede apreciar, ciertas especies presentan «colas» al final de las alas traseras, característica que comparten con muchas especies de la familia de los Papiliónidos y con otras de la familia de los Ninfálidos (se me ocurre por ejemplo la especie conocida vulgarmente como «mariposa del madroño» o «Gran Bajá», Charaxes Jasius para las personas de ciencia). También se aprecia que el tamaño promedio de los Licaénidos es de poca magnitud. Son fáciles de ver entre la hierba verde, libando no lejos de sus plantas nutricias, pero a menudo pasan desapercibidas y a veces alzan el vuelo superando la altura humana, con lo que son algo complicadas de fotografiar, salvo que las encuentres entretenidas sorbiendo el néctar de las flores con su espiritrompa.

12.- PAPILIÓNIDOS PALEÁRTICOS (1).-
Después de haberme centrado en la familia de lepidópteros de los licaénidos, paso el foco a una de las familias que presenta más bellos especímenes en todo el mundo; cuyos ejemplares normalmente poseen tamaño medio-grande, y que son rápidos voladores, la familia Papilionidae.
En el área paleártica esta familia tiene como especies más representativas algunas que ya he tratado en entradas anteriores, concretamente la Papilio Machaon, la Iphiclides Podalirius Podalirius, la Iphiclides Podalirius Feisthamelii, y la Parnassius Apollo.
En la siguiente fotografía aparecen dos de las especies antes reseñadas, Iphiclides Podalirius Feisthamelii a la izquierda, que es la Podalirio ibérica, más concretamente los ejemplares aquí presentados fueron capturados en Portugal; Papilio Machaon a la derecha; y en el centro Papilio Xuthus, que es una especie que habita en la Asia paleártica.

13.- ALGUNOS PAPILIÓNIDOS, LICAÉNIDOS, NINFÁLIDOS, GRAÉLSIDOS Y PIÉRIDOS PALEÁRTICOS.-
En esta entrada presento otra de mis cajas de colección, que tiene especímenes de cinco familias de lepidópteros propios de algunas áreas dentro de la zona paleártica del globo.

En la imagen que sigue aparecen de arriba a abajo y de izquierda a derecha, por este orden: Papilio Machaon, Lycaena Virgaeurae, Graellsia Isabellae macho, Parnassius Apollo macho, y Zerynthia Rumina.

A continuación en la foto siguiente aparecen siguiendo idéntico orden: Graellsia Isabellae macho, Anthocharis Eupheneides, Iphiclides Podalirius Feisthamelii, Zerynthia Rumina y Parnassius Apollo hembra.

Siguen más abajo: Parnassius Apollo macho, Zerynthia Rumina, Vanessa Atalanta y Graellsia Isabellae hembra.

Para ya finalizar, en la fotografía última, que es la que sigue, aparecen: Zerynthia Rumina, Parnassius Apollo hembra, Graellsia Isabellae hembra y Apatura Iris macho.

14.- PIÉRIDOS PALEÁRTICOS.-
Paso ahora a la familia de los Piéridos pertenecientes al área paleártica. En la siguiente imagen se refleja la caja de colección que tengo con especímenes de esta familia de lepidópteros.

En la imagen que sigue aparecen de izquierda a derecha, por este orden: Aporia Crataegi (blanca del majuelo), Gonepteryx Rhamni macho (limonera) y Gonepteryx Rhamni hembra,

A continuación en la foto siguiente aparecen siguiendo idéntico orden: Gonepteryx Cleopatra macho, Pontia Daplidice, Leptidea Sinapis y Anthocharis Cardamines.

Siguen más abajo: Colias Croceus, Colias Croceus Helice, Artogeia Rapae.

Para ya finalizar, en la fotografía última, que es la que sigue, aparecen: Artogeia Rapaea, Pieris Mannii y Pontia Daplidice.

15.- NINFÁLIDOS PALEÁRTICOS.-
Sigo a continuación con la extensa familia de los Ninfálidos pertenecientes al área paleártica. En la siguiente imagen se muestra la caja de colección que tengo con especímenes de esta familia de lepidópteros.

La familia Nymphalidae mantiene bajo su etiqueta a una gran cantidad de especies de lepidópteros, fundamentalmente con 2 morfologías diferenciadas, por un lado mariposas de colores cítricos y llamativos, como Aglais Io, Aglais Urticae, Nymphalis Polychloros, Nymphalis Antiopa y Polygonia C-albun y por otro lado especies algo menos vistosas, pero también bonitas, éstas últimas de tonos anaranjados en todo su anverso, con manchas alargadas y pequeñas de color negro. A esta segunda morfología es a la que pertenecen todos los especímenes de esta entrada. Esta fisonomía es típica de lepidópteros que se suelen ver en prados próximos a cursos de agua dulce y tiene como representantes más característicos especies como Pandoriana Pandora, Argynnis Paphia y especies similares a las de las fotos aquí expuestas.





16.- SATÍRIDOS PALEÁRTICOS.-
En esta entrada queda retratada la familia de los Satíridos pertenecientes al área paleártica. En la siguiente imagen está reflejada la caja de satíridos que poseo.

La familia Satyridae engloba a un conjunto amplio de géneros y especies de tonalidades poco llamativas y que suelen habitar en prados y campos de escasa altitud. Existen claros parecidos entre las especies de la caja. Así, las especies de su parte izquierda son muy similares unas a otras y siguen prácticamente todas ellas el patrón de la mariposa «loba» (Maniola Jurtina). Me refiero por ejemplo a los especímenes del género Satyrus y a los especímenes del género Coenonympha.


Mirando un poco más en el centro, tenemos una variación según la cual pasamos de colores ocres y oscuros a un dibujo casi geométrico, el de la especie Brintesia Circe, ubicada en la columna central, por encima de los cuatro ejemplares del género Coenonympha.


Finalmente, a la derecha del todo, formando las dos últimas columnas hacia ese lado, se hallan las mariposas europeas del género Melanargia, conocidas vulgarmente como «ajedrezadas». Son de este género Melanargia Galathea, Melanargia Russiae, y Melanargia Lachesis.


En la última de las fotografías publicadas se pueden observar los cuatro especímenes del género Coenonympha, muy parecidas también a la Maniola Jurtina, y que son casi una versión reducida de la misma. En este caso pertenecen además a la especie Coenonympha Arcania, si bien en mi latitud era más frecuente hace unos años la especie Coenonympha Pamphilus.
Magnífica colección.
Compartimos la pasión por los insectos, en mi caso más volcada a los odonatos y a los coleópteros. Otra forma de coleccionar insectos sin necesidad de acabar con especímenes es el hobby de la fotografía naturalística. Es todo un reto, nada fácil y que además engancha. Cada fotografía bien lograda se exhibe con gran orgullo, seguramente más aún que exhibiendo el ejemplar apresado.
Un abrazo y feliz año nuevo.
Jesús M.Landart
Estimado Jesús María :
ya hace a lo menos cinco años que me propuse precisamente lo que dices, esto es, conseguir un buen equipo fotográfico y dedicarme a la fotografía de la naturaleza. Estoy totalmente de acuerdo que eso sí que debe enganchar y que es un hobby absolutamente maravilloso. Sólo que de momento no he comprado el equipo, porque pretendo comprarme uno de calidad profesional, y tengo todavía otro vicio por delante: aunque tengo un telescopio Tassco de aficionado, quiero invertir bastante dinero en un telescopio astronómico Maksutov-Cassegrain, para observar el firmamento, de estos telescopios de última generación, y puede que no tarde mucho en cumplirme ese gusto… y después de este probablemtne venga el ansiado equipo fotográfico de la naturaleza, al que le sacaría mucho partido por mi afición por los pájaros y las mariposas. En fin, son vicios sanos y así hay que verlos.
Un saludo, e igualmente feliz año 2010.
Hola , soy Alex, me ha hecho mucha ilusión la dedicatoria del articulo y ver tu exposicion de mariposas, es muy bonita.
Mañana se lo diré a mi señorita para que las pueda ver.
Ahora le preguntaré a mi papá si me comprará una mariposa de Madagascar.
Saludos desde Barcelona.
Alex Pujadas
Hola, Alex. Me encanta que te haya gustado. Recuerda siempre que la ilusion es el motor de esto que nos ha tocado vivir, nunca la pierdas. A veces la ilusion se frustra, pero hay que seguir ilusionandose siempre, como ahora haces tu con la mariposa de Magadascar, creo que te refieres a la Crisiridia Magadascariensis.
Un abrazo.
me gustaría contactar con usted.
¿me da su teléfono o su correo electrónico?
Mi dirección de correo es sergeantalaric@gmail.com.
Un saludo, y gracias por participar.
Hola en hora buena por tu blog, te animo a que mires mi blog y me votes, yo ya te he votado un abrazo si…eso.